Andres Gonzalez
Co-Fundador A&M Fitness
Entrenador Personal NCSF/ Nutricionista Deportivo NCSF
Certificado en Nutricion Infantil
Politecnico de Colombia
El entrenamiento de pesas tiene muchos beneficios para las mujeres. Además de moldear su silueta, entrenar con diferentes pesos ayuda a aumentar la densidad ósea, disminuyendo enfermedades como la osteoporosis u osteoartritis. Por otro lado, previene la aparición de celulitis y ayuda a reducir los niveles de grasa. A pesar de lo anterior, muchas personas les temen a las pesas. Hoy vamos a desmentir los mitos más grandes de las mujeres y el entrenamiento de pesas.
#1 Si levanto mucho peso me voy a ver como un hombre.
FALSO
Este argumento es natural y hormonalmente imposible. Los niveles de testosterona del hombre son mucho más altos que los de la mujer. Es decir, el sexo masculino es capaz de desarrollar más musculo que el sexo femenino. La mujer produce solo alrededor del 10% de la testosterona del hombre, disminuyendo sustancialmente el aumento de su masa muscular. Además, el entrenamiento con pesas para mujeres aumenta la densidad ósea y previene la pérdida de masa muscular pos menopausia
#2 Las pesas no sirven para bajar de peso. Solo con hacer cardio es suficiente.
FALSO
En mis años de experiencia cuando una mujer dice que quiere bajar de peso usualmente no se refiere solo eso. La mayoría de veces busca un cambio en como se ve su cuerpo. Es decir, desarrollar más glúteos, piernas o fortalecer los brazos. Haciendo solamente cardio no vas a poder obtener un cambio de figura de este tipo. Es el desarrollo muscular que le da forma a tu cuerpo.
Por otro lado, el musculo es un tejido metabólicamente activo. Quiere decir que solo por tenerlo estas quemando más calorías ya que el cuerpo necesita producir una mayor cantidad de oxígeno para mantener el tejido muscular. A diferencia del cardio, el musculo tiene la capacidad de seguir usando calorías después de terminar el entrenamiento.
#3 Solo necesitas entrenar piernas, el tren superior no importa.
FALSO
La mayoría de las mujeres tienen una pequeña obsesión por entrenar piernas. A su vez, muchos hombres solo se enfocan en el tren superior. El problema de esto no es solo sobre entrenamiento, sino también el pensamiento que la parte superior del cuerpo no influye en los ejercicios del tren inferior y viceversa.
La espalda, hombros y abdominales están directamente involucrados en movimientos como el peso muerto, sentadillas y otros. Entrenar todas las partes del cuerpo ayuda evitar una desproporción en el desarrollo muscular y a realizar de mejor manera todos los demás ejercicios.
#4 Utiliza solamente pesas livianas.
FALSO
Es muy común escuchar que las mujeres tienen miedo de levantar pesos pesados y en cambio, se enfocan en “tonificar” su cuerpo usando pesas livianas Atención: ¡el musculo no se tonifica!
Si, se puede desarrollar masa muscular y quemar grasa, pero levantar pesas livianas solo te va a llevar hasta cierto punto. El cuerpo es capaz de genera una tolerancia al mismo estimulo disminuyendo los resultados. ¡Necesitas maximizar tu esfuerzo!
No estoy hablando de sacrificar tu forma por más peso. Por eso sugiero la combinación de pesos pesados como livianos en la rutina dependiendo del ejercicio. Sal del área de confort y date cuenta que tu cuerpo puede llegar al siguiente nivel. Recuerda que las pesas son solo una herramienta, el musculo responde al tiempo bajo tensión.
# 5 Las mujeres necesitan una proteína diferente a la de los hombres
FALSO
El mercado de los suplementos está en continuo crecimiento. Nos encontramos con productos nuevos todas las semanas. Lo que hay que tener claro es que un suplemento de proteína funciona de la misma manera tanto para las mujeres como para los hombres.
El hecho de que una mujer lo promocione o que los colores sean más atractivos para el sexo opuesto no significa que una mujer o hombre no lo pueda consumir. Normalmente, cada marca de proteína tendrá sus propias cantidades de proteínas, carbohidratos, grasas y calorías. Depende de ti escoger cual es la que mejor se amolda a tu estilo de vida y metas.
Puede ser que la cantidad de proteína que requiera un hombre sea mayor que la de una mujer. Pero, eso no quiere decir que se necesiten dos productos totalmente diferentes.